Operación bikini

¡Qué hambre! Me suenan las tripas desde hace un rato y todavía me quedan tres y horas y media para comer. ¡Mierda de kilos!

No, si muy gorda no estoy, ni siquiera gorda. Ahora, delgada, delgada, lo que se dice delgada tampoco. Tengo un poco de tripa que, según todos los efectos procede de la dilatación de la piel después de dos embarazos, ya, ¿y porqué a otras no les pasa? Ya se la respuesta: hacen deporte, se cuidan más, comen menos, etc, etc, etc ...

No me consuela. Esto es como cuando me dolían los ovarios cuando me bajaba la regla y mi madre siempre contestaba: “Ya sabes de lo que es”. Ya. Pero no por eso deja de doler.

¡Con lo a gusto que me comía yo ahora un bocadillo de ...lomo con pimientos, ...bacon con queso, ...tortilla de patatas, ...ummmmm! ¿hace hambre?

Menos mal que me encanta el gazpacho y además es light. Eso y los cereales del desayuno son mi operación bikini.