lunes, octubre 01, 2007

La vida

Comienza una nueva etapa de mi vida.

Nuevos horarios y nuevos quehaceres.

Me da un poco de miedo, no creáis. Me da un poco de miedo que a partir de ahora mi vida se limite a meriendas, deberes, aspiradora y plancha.

Me olvido de aquellas pocas ocasiones en las que me quedaba a tomar unos vinos, me olvido de ir corriendo a Zara y HM a ver algo de ropa y, lo que más me cuesta, me olvido de las comidas en grupo, comentarios, cotilleos y risas. A partir de ahora estaré fuera de onda, entre otras cosas porque al trabajar menos horas tengo que hacer el mismo trabajo en menos tiempo y, por lo tanto, los momentos de asueto serán muchos menos.

Tendré que acostumbrarme a las conversaciones de parque y de salida del colegio: comentarios vanos y ligeros. Al fin y al cabo cuando alguien pregunta qué tal no es para que el otro le cuente sus penas ¿no?. Si lo haces piensan de ti que eres una tarada.

Así que me enfundaré la sonrisa de los viernes para el resto de la semana no vayan a decir por ahí que la madre de .... es una secorra.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

He descubierto tu blog por casualidad los otros días. Y hoy vengo a decirte que me ha gustado soberanamente.
Vengo del foro de JA, navegando aquí y acullá dí con tus palabras: yo también a veces "me siento un poco simple como los niños que se inventan un mundo de fantasía que luego creen real". Tal vez sea un escape? un fusible? un relax para el ajetreado cerebro.
Es maravilloso sentirse vinculada por las palabras a cientos de kilómetros, es verdad, que tal vez sea porque llevamos vidas parecidas a la de cientos de mujeres en este planeta. Pero igual es maravilloso sentirse conectada, identificada.
También he pasado por el trámite de trabajar menos horas, sentirme menos independiente pero con más tiempo para mis hijos, extrañé (y extraño)los comentarios de mis compañeros de trabajo pero gané tiempo para charlar con amigas, también tengo 40 y la vida enloquecida que llevaba a los 28 ya no es para mí, gané en salud y en tiempo para pequeños placeres. Cambios al fin.
Espero que en esta tu nueva etapa camines con buenos pasos, y ojalá rescates tiempo para escribir, te estaré leyendo.
Saludos
María del Carmen Petrocelli

Anónimo dijo...

Sobre las conversaciones ligeras:

En una ocasión leí esta definición: 'Un pelma es una persona a la que le preguntas qué tal está y va y te lo cuenta'.

MK

Free counter and web stats